miércoles, 30 de abril de 2014

Tú no eres ateo

   En la contigüidad, hubo un sabio estudioso de la Biblia que decía no creer en Dios.
Un día, mientras leía un versículo del libro sagrado tratando de interpretarlo, un hombre del pueblo entró en la biblioteca.
Gran maestro-le dijo-, ¡qué gusto encontrarlo! Hace mucho que deseaba conocerlo, porque yo soy ateo como usted.
Ahh...qué bien-dijo el maestro-. Quizás puedas ayudarme en el análisis de este texto bíblico.
Y le extendió el libro en su dirección.
El hombre se apartó diciendo:
¿Yo?...No, yo no sé nada de la biblia.
¿Leerás entonces el Corán?-le preguntó el anciano.
¿El corán? No.
Te dedicarás por entero al Talmud, entonces...
No, yo no tengo tiempo para esas cosas. Además yo soy ateo.
No te equivoques-dijo el sabio-. Tú no eres ateo, tú eres simplemente ignorante.

No hay comentarios:

Publicar un comentario